Un peligro silencioso amenaza a toda Europa
Un peligro silencioso amenaza a toda Europa.
La avispa asiática, una especie exótica invasora, sigue ganando terreno. Al atacar masivamente a todos los insectos, debilita todo nuestro ecosistema y pone en peligro directamente nuestra biodiversidad, nuestra seguridad y nuestro futuro alimentario.
Un círculo vicioso que nos amenaza a todos.
Masacre de polinizadores: Un nido de avispa asiática devora hasta 11 kg de insectos al año, atacando principalmente a nuestras abejas domésticas y silvestres, pero también a una multitud de otros insectos esenciales para la polinización y el equilibrio de nuestros ecosistemas. La desaparición de estos centinelas debilita toda la cadena de la vida. Véase el artículo: la dieta de la avispa asiática: más de 11 kg de insectos devorados al año por un nido de avispa asiática
Proliferación exponencial: Un solo nido no destruido puede dar lugar a entre 5 y 15 nuevas colonias al año siguiente, con una densidad de nidos por km² que puede alcanzar los 20 nidos si no se toman medidas.
Y cada nido produce entre 200 y 500 reinas en otoño.
Seguridad pública y profesional amenazada: El riesgo de ataque es real para nuestros niños, nuestras familias, las personas con alergias y nuestras mascotas. Este peligro también afecta directamente a recolectores, arboristas y otros trabajadores del campo.
Nuestros alimentos y cultivos están en peligro: Menos abejas y polinizadores implican menos polinización, lo que a su vez se traduce en un colapso de las cosechas. Además, la avispa asiática ataca frutas maduras o casi maduras (peras, ciruelas, uvas, manzanas), dejándolas invendibles y aumentando así las pérdidas para los profesionales. No se equivoquen: el día en que no haya suficientes polinizadores para nuestros cultivos, nuestros alimentos se convertirán en un lujo inasequible.
Economía local debilitada: Nuestros apicultores, agricultores, fruticultores, viticultores, jardineros, podadores, cazadores, pescadores y muchos otros están en primera línea, sufriendo pérdidas que amenazan la sostenibilidad de sus negocios.
Una emergencia de salud pública y ambiental.
A falta de una estrategia integral y sistemática, los ciudadanos a menudo se ven abandonados a su suerte ante esta plaga. La falta de recursos o información empuja a muchas personas a la inacción, dado el coste a menudo elevado de la intervención.
¡Este no es un problema privado! El argumento de la "competencia desleal" contra las empresas privadas, a veces utilizado para justificar la inacción pública, es inaceptable ante una crisis de esta magnitud. Regular una especie invasora que amenaza la seguridad de todos, la biodiversidad y nuestra cadena alimentaria no es un mercado; es una responsabilidad colectiva.
Dejar que la seguridad de todos y la protección de nuestro medio ambiente dependan de presupuestos individuales es una injusticia social y un error estratégico que nos costará mucho más en el futuro.
Nuestra petición
Por lo tanto, instamos a las autoridades federales, valonas, bruselenses, provinciales y municipales a que asuman sus responsabilidades e implementen un plan de acción coordinado, ambicioso y accesible a todos los ciudadanos, que incluya:
Cobertura financiera (completa o con importantes subvenciones) para la destrucción de nidos de avispa asiática en Valonia y Bruselas, incluso en propiedades privadas.
Campañas de concienciación: a gran escala para informar a la población sobre los peligros y las medidas adecuadas a tomar. Cada municipio debe concienciar a sus ciudadanos a través de los canales habituales y garantizar que la información y los descubrimientos de nidos se transmitan al municipio, que posteriormente podrá enviar equipos de control de plagas para su destrucción.
Se necesita cooperación urgentemente.
Mayor apoyo: para nuestros apicultores, agricultores, fruticultores y demás profesionales afectados, quienes son los verdaderos guardianes de nuestro medio ambiente.
La inacción de hoy es la crisis del mañana.
No dejemos que la avispa asiática dicte el futuro de nuestros paisajes, nuestros ecosistemas y nuestros platos.
¡Protejamos nuestra biodiversidad, nuestras abejas, nuestros alimentos y nuestra seguridad!
Firma la petición y compártela ampliamente: asumamos la responsabilidad y cambiemos las cosas. ¡Juntos, podemos marcar la diferencia!
La FAB-BBF (Federación de Apicultores Belgas), la URRW (Unión Real de Colmenares Valones), la Frupah, la FABW, la FPAL
La FAB-BBF (Fédération des Apiculteurs de Belgique), L'URRW (Union Royale des Ruchers Wallons), La Frupah, La FABW, La FPAL Contactar con el autor de la petición